¿Cómo pueden mejorar los drones las explotaciones de olivar? Es la pregunta a la que durante dos años intentará dar respuesta el Grupo Operativo «Proyecto I+D+i Agricultura de precisión en el olivar usando Sistemas Aéreos No Tripulados» que coordina ASAJA y que también se está desarrollando en Almería

Se realiza a través de un grupo operativo coordinado por ASAJA en Jaén y en el que también participan ASAJA en Granada, Córdoba, Almería y Málaga, la Fundación Andaluza para el Desarrollo Aeroespacial (FADA), la Universidad de Jaén, la Fundación Caja Rural, el Instituto Formación Agraria y Pesquera de Andalucía (IFAPA).

El grupo operativo es uno de los más ambiciosos e innovadores de Andalucía. Estudia la aplicación de los RPAS (drones) a la agricultura de precisión y, más concretamente en el cultivo del olivar. Con un presupuesto de 300.000 euros, incluidos dentro del PDR 2014-2020 para grupos operativos cuenta con la cofinanciación de la Unión Europea a través del FEADER y la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural.

El grupo echó a andar el pasado verano y ya se han realizado dos vuelos y toma de muestras en las explotaciones seleccionadas en Almería, Málaga, Córdoba, Granada y Jaén.

Durante el pasado mes de octubre y  noviembre se ha realizado las primeras toma de muestras y recogidas de datos en la provincia de Almería, donde ASAJA ha coordinado y supervisado la realización del estudio.

Conocer un poco más sobre los agentes que participan en el Grupo

FADA, Fundación Andaluza para el Desarrollo Aeroespacial, es la responsable de realizar los vuelos con drones.

La Fundación ha diseñado el sistema UAS o dron y, aconsejado por ASAJA, se desarrollarán las aplicaciones necesarias para definir los sensores que se utilizarán y los datos que se deberán analizar en los vuelos que se van a realizar durante todo el proyecto.

Una vez realizada la campaña de vuelos, se llevará a cabo el procesamiento de datos para obtener información útil sobre el estado del cultivo. Así, se determinarán deficiencias nutricionales, el estado óptimo de maduración de la aceituna para su recolección, información del estado del suelo (ej. estado de humedad), la detección de posibles plagas… etc.

De esta forma, según explican desde FADA-CATEC, se espera que con las conclusiones obtenidas, en un futuro próximo, se puedan utilizar los drones como una herramienta útil y que se  pueda usar en el día a día de este cultivo.

Análisis de campo

Al mismo tiempo que los drones vuelan en las fincas seleccionadas, los técnicos del Laboratorio Olivarum, de la Fundación Caja Rural, realizan un estudio de campo con muestras de suelo, hojas y aceituna con el fin de analizar (humedad del suelo, estado de maduración de la aceituna, entre otros parámetros) y compararlos con los obtenidos por el dron.

Lola Peña, directora del Laboratorio Olivarum de Caja Rural, explica que el centro va a certificar o calibrar los sensores que lleva acoplado el dron con los análisis de campo que ellos mismos van a realizar. «De tal manera que si coinciden con los análisis in situ tendremos una herramienta muy eficaz porque el dron tiene mucha facilidad para tomar datos, lo hace de manera rápida e inmediata», apunta. «Si los calibramos, tendremos una herramienta muy eficaz para la toma de decisiones en la explotación. Una agricultura más precisa y más sostenible, que use menos agua, menos abonos…», matiza

Habrá dos tomas de muestras de hojas suelo y probablemente otras dos en aceituna y aceite. Olivarum participa en este proyecto a través de la Fundación Caja Rural.
Por su parte, el IFAPA establecerá un modelo que permita determinar el momento óptimo de recolección del fruto en función de su contenido graso y las características del aceite a partir de las imágenes espectrales tomadas mediante drones.  «Intentaremos establecer cuándo y cómo hay que recoger la aceituna», indica Gabriel Beltrán, investigador del IFAPA, «se podría establecer el momento de apertura real de las almazaras y también el momento de recolección para el agricultor indicándole cuál es el periodo en el que los aceites presentan las mejores características sensoriales», apunta.

«Ese traslado implica un incremento del valor añadido de nuestros aceites de la cosecha desde el árbol», añade.

Apoyo de la Universidad

La Universidad de Jaén trabaja en el proyecto a través de un grupo de investigación de robótica automática y visión por computador.

Diego Martínez Gila, investigador de la Universidad de Jaén cuenta  que «una de nuestras líneas de trabajo se centrará en la visión por computador, tanto en el espectro visible como  en el de infrarrojo».  Además, trabajará en el diseño del experimento: cuántos vuelos son necesarios o qué altura se necesita para ver con qué resolución se cuenta. Desde la Universidad se diseñará también la plataforma software que nos permitirá almacenar la cantidad de imágenes que se generen en los vuelos y a la que los drones la enviarán a tiempo real.