El Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea, reunido hoy para conseguir un mandato negociador que permita cerrar con el Parlamento Europeo la reforma de la Política Agraria Común (PAC). Los Estados miembros intentarán el lunes avanzar en los puntos de la reforma agrícola aún pendientes de acuerdo, presionados por la necesidad de cerrar lo antes posible un pacto con el Parlamento Europeo (PE) para que el nuevo régimen pueda empezar a aplicarse a partir de 2014.

Aunque en junio los países y la Eurocámara llegaron ya a un acuerdo sobre la práctica totalidad de la nueva Política Agrícola Común (PAC), decidieron dejar aparte algunas cuestiones, relacionadas con el próximo marco presupuestario (2014-2020).

El consejo de ministros de Agricultura se reunirá el lunes para debatir en un almuerzo de trabajo esos aspectos, que incluyen el tope a las ayudas a los grandes terratenientes y su «degresividad», la transferencia de dinero entre pagos directos y ayudas de desarrollo rural y los niveles de cofinanciación de las subvenciones.

Al Parlamento Europeo le gustaría hacer algunos cambios en esos puntos, vinculados al marco financiero que la UE cerró el pasado febrero, pero denuncia que el Consejo no le ha dejado prácticamente margen para hacerlo.

El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ha manifestado que España viene a Bruselas con una posición “flexible”, “porque creemos que hay que cerrar ya esta reforma y los agricultores sepan pronto qué nivel de ayudas van a recibir y de qué forma se les van a pagar”. A este respecto, el ministro está convencido de que el Consejo, a pesar de las reticencias de algún Estado miembro, va a llegar a un acuerdo para poder avanzar en las negociaciones con el Parlamento.

El ministro ha mostrado su confianza en que la Unión Europea cierre pronto esta reforma y que no haya un conflicto entre el Parlamento Europeo, el Consejo y la Comisión.

Por un lado, Arias Cañete ha explicado que el Parlamento Europeo está solicitando que las ayudas por encima de 150.000 euros tengan un porcentaje de reducción más alto del 5%, que es el que estableció el Consejo. “Y creo que entre lo que pide el Parlamento en estos momentos y lo que estableció el Consejo se puede buscar un justo término”, ha asegurado.

Además, el ministro ha señalado que el Parlamento también está demandando que por encima de 300.000 euros de ayuda haya otro porcentaje adicional, “aunque eso en España no nos afectaría porque ya hemos tomado la decisión de limitar las ayudas a los 300.000 euros, siempre limitadas a las que no son del reverdecimiento y teniendo en cuenta, además, el empleo generado en la explotación”.

Por otro lado, el ministro ha indicado que España no se opone a que se incrementen las tasas de cofinanciación en el segundo pilar (desarrollo rural), “teniendo en cuenta las dificultades que tienen muchas comunidades autónomas de financiar los programas de desarrollo rural en el futuro, dadas las tensiones presupuestarias”, ha aclarado.

AYUDAS DIRECTAS

En cualquier caso, el ministro ha mostrado la satisfacción de España por el resultado de la negociación de la reforma, con unas cifras financieras que van permitir al sector agrario español disponer de más de 35.700 millones de euros para ayudas directas, más de 8.300 millones para políticas de desarrollo rural y casi 4.000 millones para medidas de mercado. Según ha precisado Arias Cañete, este marco financiero ha permitido llegar a un acuerdo con las Comunidades Autónomas para la aplicación de la PAC en España, “que va por muy buen camino”.

Publicado: 23 septiembre 2013