Con motivo de la adopción del reglamento relativo a los sistemas de calidad aplicables a los productos agrícolas y a los productos alimentarios, los eurodiputados defendieron la introducción de esta etiqueta a nivel europeo. El reglamento entró en vigor a principios de este año y otorga a la Comisión el poder de adoptar los criterios pertinentes para esta etiqueta optativa que “ofrece a los productores de montaña un verdadero instrumento que permite comercializar mejor sus productos y reducir los riesgos reales de confusión entre los consumidores”.

Según propone la Comisión, aquellos productos fabricados en un perímetro de 30 km de la región montañosa podrán ser etiquetados como tal. Esta medida parece no convencer a Euromontana, la Asociación Europea para las Zonas de Montaña, quien declara que este tipo de reglas puede difuminar la esencia de la etiqueta y hacer que las operaciones con valor añadido se efectúen en zonas llanas, lo que tendrá un impacto en la calidad del producto final.

Antes de que la etiqueta vea la luz, en primavera de 2014, tendrá que obtener la autorización del comité de la Organización Mundial del Comercio (OMC) denominado “Obstáculos técnicos para el comercio”, tras examinar el proyecto durante dos meses. A partir de entonces, los eurodiputados y Estados miembros contarán con un periodo de dos a cuatro meses para evaluar los criterios. Por su parte, la Comisión tendrá que publicar a principios de enero un informe sobre la viabilidad de un nuevo sistema de etiquetado de los productos locales.

Publicado: 5 noviembre 2013
Fuente: Besana.es